Así celebraban la Navidad los criminales CLICK AQUI






'Hic sunt dragones' (“aquí hay dragones”) es una leyenda que solía utilizarse en los mapas medievales para referirse a aquellos territorios peligrosos o que aún no habían sido explorados por el hombre. A veces se les representaba con la imagen de un animal mitológico, una nada sutil estrategia para mantener lejos a los desprevenidos viajeros que se atreviesen a acercarse a dichas zonas.

El periodista y marinero francés Olivier Le Carrera ha publicado 'El atlas de los lugares malditos' (Planeta), una guía de viaje a lo que considera “los destinos más peligrosos y aterradores del planeta”. Él mismo ha pisado 30 de los 40 lugares que aparecen en el volumen, uno de esos libros de mesa de salón que tan bien quedan para que las visitas los hojeen (o, incluso, ojeen).

....
Como explica el autor en el libro, hay tres grandes clases de maldiciones que pueden aquejar a un lugar. Por una parte, las de orden místico o paranormal, relacionadas con las leyendas a veces inmemoriales. Es el caso, por ejemplo, del triángulo de las Bermudas. En segundo lugar, se encuentran las zonas que se han convertido en inhabitables o muy peligrosas debido a las condiciones naturales, como ocurre con los Mavericks (en California), donde muchos surfistas acuden cada año incluso a riesgo de sus propias vidas. Por último se encuentran aquellos sitios que, lamentablemente, el hombre ha convertido en malditos con su propia acción. El ejemplo más elocuente es Gaza, tradicionalmente un punto de encuentro para egipcios, asirios, babilonios, persas, griegos y romanos y hoy el centro del conflicto palestino-israelí. Vámonos de viaje.